La importancia del ejercicio para las personas mayores durante el confinamiento

La importancia del ejercicio para las personas mayores durante el confinamiento

El confinamiento es necesario y el método más eficaz para evitar que la enfermedad por el Covid-19 siga expandiéndose, sin embargo, esto no quita las consecuencias psicologicas y fisicas que genera. Mantenerse activos física y mentalmente es muy importante para la salud integral. Para ello, el ejercicio es parte clave del bienestar integral y el hecho de estar en casa no es motivo para abandonarlo. 

Para todos es de suma importancia, y las personas mayores no están exentas de esto, y es que realizar una rutina sencilla de ejercicios ajustados a la condición física, edad y salud traerá muchas ventajas y ayudará mantener cierta normalidad en el día a día. 

Ventajas de realizar ejercicios en casa para los mayores

Junto con una dieta equilibrada rica en vitaminas y antioxidantes para mantener el sistema inmune fuerte, y una buena hidratación, mantener el cuerpo activo contribuye a una buena salud integral. Y es que, el confinamiento limita nuestra movilidad, sin embargo, para las personas mayores la falta de actividad física se traduce en un deterioro muy rápido de su salud.

Por ello, realizar una rutina sencilla que ponga en movimiento el cuerpo, siempre respetando las limitantes físicas, es muy importante. Trayendo beneficios como:

  • Mejorar el equilibrio
  • Favorecer el nivel de movilidad
  • Prevenir la pérdida de masa muscular.
  • Mejorar la postura corporal.
  • Ayudar a aumentar la energía, la autoestima y mantener la mente ocupada.
  • Contribuir al bienestar físico.
  • Mejorar el descanso nocturno.

¿Qué ejercicios hacer?

Como hemos comentado, la actividad física debe estar regulada y llevada a cabo de acuerdo a la condición física de la persona mayor. Lo ideal es hacerlo en compañía, sea de familiares o de su cuidador. Algunas ideas para ejercitarse en casa son:

Empezar por el calentamiento: nunca se debe iniciar alguna rutina sin haber calentado antes. Con 5 minutos de estiramientos y flexiones es suficiente. Lo importante es mover suavemente cada parte del cuerpo, cuello, brazos, tronco, rodillas y pies. 

Luego de esto se puede iniciar con ejercicios suaves destinados a activar el cuerpo por zonas. 

Ejercicios para la flexibilidad: mantener la flexibilidad durante la vejez es algo muy importante, y que puede perderse rápidamente. Los ejercicios de estiramiento son los mejores para esto, y se trata de movimientos suaves que buscan estirar todo el cuerpo. Un ejercicio muy efectivo para esto es:

  • Ponerse de pie, derecho y estirar los brazos hacia arriba lo más que se pueda, como si se intentara alcanzar el techo, y mantener esta posición por 20 segundos. Repetir 3 veces.

Ejercicios para los músculos del cuello: con tantas articulaciones y músculos, el cuello suele generar molestias de forma frecuente. Un ejercicio para fortalecerlo muy eficaz es:

  • Estando de pie o sentados hacer suaves movimientos circulares con el cuello. 3 a 5 vueltas a cada lado es suficiente para iniciar.

Ejercicios para los músculos de los hombros: los hombros cargan mucho peso y tensión, e inciden directamente en la postura. Un ejercicio sencillo para las persona mayores enfocado a esta zona es:

  • Extender los brazos hacia ambos lados del cuerpo, a la altura de los hombros y alternar poniendo las palmas hacia abajo y hacia arriba. Realizar este movimiento 3 a 5 veces de forma fluida y suave.

Ejercicios para fortalecer la espalda: permanecer mucho tiempo sentado puede ocasionar dolor de espalda y hombros. Para prevenir o corregir esto una buena alternativa es:

  • Sentarse en una silla firme sin reposabrazos y extender ambos brazos hacia adelante a la altura de los hombros, y flexionar las manos hacia arriba como diciendo alto. Mantener este estiramiento por 10 segundo y hacer 3 repeticiones.

Estos son ejercicios sencillos recomendados para personas de la tercera edad, pueden combinarse con ejercicios para el equilibrio y piernas para una rutina completa. La idea es mantener el cuerpo y la mente activos, y con 20 o 30 minutos que se dedique a este tipo de ejercicios bastará para lograr mejorar la movilidad y contribuir al desarrollo de la vida diaria. Siempre recordar que la intensidad, tiempo y repeticiones se deben ajustar a las capacidades físicas de cada persona.