Hacerse mayor implica, en términos de salud, ser más vulnerable a ciertas enfermedades relacionadas tanto con el deterioro físico como cognitivo. De hecho, hay una serie de enfermedades comunes en la vejez que requieren de la sensibilización del entorno familiar y social para que puedan ser atendidas y entendidas adecuadamente.
Las enfermedades más comunes en la vejez son de diversa índole y pueden llegar a ser muy limitantes para la persona mayor, y pueden requerir tratamientos especiales y ayuda personal. Además, por lo general son de tipo crónico. A continuación vemos cuáles son estas dolencias.
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Osteoartritis
La osteoartritis es un problema de salud común en la vejez. Esta enfermedad es una causa común de dolor crónico y discapacidad. La obesidad es un factor de riesgo para la osteoartritis, por lo que a medida que la población envejece y se va ganando peso es más fácil que aumente la tasa de artritis severa, especialmente de cadera y rodilla.
Osteoporosis
La osteopenia es la pérdida normal de densidad ósea con el envejecimiento. Sin embargo, muchos ancianos tienen osteoporosis, un debilitamiento más severo de la densidad ósea. La osteoporosis se asocia con una mayor tasa de fracturas óseas, mientras que la osteopenia no.
Depresión
La depresión no es una consecuencia normal del envejecimiento. El duelo puede ser una respuesta normal a los eventos de la vida que ocurren con el envejecimiento.. Además, destaca el hecho de que la depresión es más común entre los ancianos institucionalizados y aquellos con discapacidades. Además, es importante señalar que la depresión es una amenaza para la salud de las personas mayores, entre otras cosas, porque puede disminuir la inmunidad.
Diabetes tipo 2
Las tasas de diabetes tipo 2 aumentan a medida que las poblaciones envejecen y aumentan las tasas de sobrepeso y obesidad. Uno de los problemas de la diabetes es que es factor de riesgo importante de enfermedad cardiovascular. Además, también se asocia con enfermedad arterial periférica y neuropatía periférica, lo que contribuye a las úlceras y amputaciones del pie diabético.
La adopción de hábitos más saludables, como el ejercicio regular y una dieta bien equilibrada, puede mantener los niveles de glucosa en sangre en un rango normal y evitar la disminución de la salud.
Gripe y neumonía
Aunque la gripe y la neumonía no son afecciones crónicas, estas infecciones se encuentran entre las principales causas de muerte en personas mayores. Las personas mayores son más vulnerables a estas enfermedades y menos capaces de combatirlas.
Hipertensión
La hipertensión es una de las enfermedades crónicas más comunes en ancianos. La hipertensión sistólica aislada es particularmente común entre los adultos mayores y está asociada con la mortalidad incluso en edades avanzadas. De hecho, la hipertensión puede causar problemas graves para el corazón, los vasos sanguíneos, los riñones y otros sistemas del cuerpo.
Cáncer
Uno de los mayores factores de riesgo para muchos tipos de cáncer es la edad. De hecho es una importante causa de muerte entre los adultos mayores. No obstante, a partir de los 85 años, la tasa de mortalidad por cáncer comienza a disminuir. Es más, los tumores de crecimiento lento parecen ser comunes en esta población.
Enfermedades cardiovasculares
La enfermedad cardiovascular sigue siendo la causa más común de muerte de los adultos mayores, aunque las tasas de mortalidad han disminuido en los últimos 20 años. Algunas enfermedades cardiovascular son la cardiopatía isquémica crónica, la insuficiencia cardíaca congestiva y la arritmia.
Enfermedades respiratorias
Las enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica ( EPOC), el asma o la bronquitis son una causa común de muerte entre las personas mayores. Tener una enfermedad respiratoria crónica aumenta los riesgos para la salud, lo que lo hace a la personas más vulnerables a la neumonía y otras infecciones.
Demencia y Alzheimer
La enfermedad de Alzheimer y la demencia son condiciones de salud que afectan a muchos ancianos. Las tasas de estos problemas de salud aumentan con la edad. Sin embargo, aunque la incidencia de demencia aumenta con la edad, no se considera una parte natural del proceso de envejecimiento
El deterioro cognitivo tiene un impacto significativo en la salud de las personas mayores. De hecho, la mortalidad por enfermedad de Alzheimer ha aumentado en los últimos años.