Consejos para una buena convivencia cuidador vs persona mayor

Consejos para una buena convivencia: cuidador vs persona mayor

La relación entre un cuidador y la persona que cuidada no siempre es idílica, aunque ese sea el objetivo, en un post anterior hablamos sobre qué hacer cuando la persona no acepta los cuidados. Pero, cuando ya se cuenta con el apoyo de un profesional, y no se ha logrado una buena convivencia, o cuando la persona continúa renuente a recibir la atención, la situación es tensa, y puede traer más problemas que beneficios.

Si este es el caso de tu familiar, es importante tratar de solucionar el problema, y para ello tenemos algunas recomendaciones, aunque un profesional debe saber cómo actuar, nunca está de más saber qué hacer en estos casos.

Recomendaciones para mejorar la convivencia

El servicio de cuidado a una persona de edad avanzada o alguna persona con dependencia busca atender, mejorar la calidad de vida, brindar compañía, seguridad e incluso tranquilidad a la persona que recibe los cuidados, y también a sus familiares. Para alcanzar este objetivo, tenemos las siguientes sugerencias:

  • Si aun el servicio no ha iniciado, pero ya existe la contratación, y el adulto mayor está en contra, una buena forma de empezar es de forma paulatina, pasar de pocas horas un día a la semana, hasta llegar al horario que se necesita. Ir avanzando a medida que se vayan viendo progresos.
  • La familia, evaluando todas las necesidades de la persona, debe definir con el cuidador las tareas a desempeñar por el profesional, y de esto modo no ocupar espacio o tiempo de la persona innecesariamente.
  • El cuidador debe centrarse en sus funciones, y no buscar suplir todas las actividades de la persona, así esta no lo necesite. Se recomienda, cuando hay negativa en recibir ayuda, trabajar en conjunto, integrando a la persona en las actividades, (todo de acuerdo con sus capacidades).
  • Hay personas muy reservadas, y así no se sea, es importante respetar la intimidad, no hablar temas que no le competen o con los que la persona se siente un poco incomoda.
  • Respetar el espacio personal del mayor, si este tiene la capacidad de realizar una actividad por si solo, no cuartearle la iniciativa.

La clave de una buena convivencia es la comunicación y el respeto. Es importante entender la perspectiva del adulto mayor, no imponer una decisión. Poco a poco, con las acciones correctas, se podrán apreciar todas las ventajas que se puede obtener de contar con el apoyo de un tercero.