¿Qué hacer y cómo actuar ante caídas en personas mayores. Desde Auxiliatus tenemos varios consejos de expertos en salud para darte.

Caídas en personas mayores. Consejos para saber cómo actuar

Debido a la pérdida de la movilidad, la vista o a causa de mareos o enfermedades, las caídas en personas mayores pueden ocurrir con frecuencia. Son un gran peligro para los abuelos, pues los expone a lesiones importantes, contusiones y, en el peor de los casos, la muerte. 

Una pérdida del equilibrio, traspiés o tropezón no debe tomarse a la ligera, pues muchos de ellos producen fracturas de caderas u otras zonas. Recuerda que al envejecer la salud ósea se va deteriorando también; se hacen más frágiles y porosos. 

Los cuidados profesionales y las adaptaciones en casa son muy efectivos para minimizar el riesgo, pero incluso ante el mejor de los escenarios muchas caídas son inevitables. Ante una inminente caída hay que saber actuar. 

Mantén la calma

Evita desesperarte o asustarte, respira y conserva la calma, en especial, si el abuelo está consciente y muy asustado. Háblale sin alterarle y dile que le ayudarás a incorporarse, en caso de que esté consciente y no tenga demasiado dolor para moverse. Si luego de la caída ha perdido el conocimiento o tiene mucho dolor, llama a emergencias. 

En caso de llamar a emergencias, comprueba si hay signos de fractura o alguna herida para que puedas informar previamente a los servicios médicos el nivel de gravedad. Adicional, despeja el área alrededor de la persona mayor. 

Busca apoyo para levantar al abuelo 

Si has evaluado que la caída no fue grave, entonces puedes intentar levantarlo. Ve poco a poco y solo haz movimientos suaves. Ayúdate con dos sillas o bancos de apoyo. Ubica una de las sillas a los pies del adulto y otra en su cabeza. Pídele al abuelo que levante poco a poco su espalda y tú empuja sus hombros desde su espalda por detrás del cuello, hasta que esté sentado.  

Luego, ponlo de costado con las rodillas flexionadas. Gíralo poco a poco hasta que esté en cuatro patas. Acerca una de las sillas para que pueda apoyar sus brazos en ella y con tu asistencia erguirle, en eso pon la otra silla a disposición para que pueda sentarse.  

Levantar al adulto mayor sin apoyo 

Si no tienes un objeto cerca que te sirva de ayuda y el abuelo no es tan pesado, puedes intentar levantarlo tú solo. Primero por tus pies a cada lado de la cadera, dejando un pie más adelantado que el otro. Con las rodillas flexionadas, pon tus manos a la altura de la zona abdominal y los brazos del mayor sobre los tuyos. Poco a poco estira tus rodillas, mueve el pie más adelantado a la altura del pie que dejaste atrás y con el impulso eleva al abuelo. 

Lo que debes evitar 

  • Mover a quien se ha caído si tiene una herida o lesión. 
  • Movimientos o gestos bruscos. 
  • Forzarle a levantarse si tiene dolor. 
  • Moverlo sin ayuda si la persona es pesada o tiene movilidad reducida. 
  • Forzar movimientos en su cuello o cabeza, halarle por los brazos. 

Investigar la causa de la caída

Después de atender las caídas en personas mayores, es prudente conocer qué la ha provocado para aplicar correctivos, de ser viable. Es común que causas físicas y riesgos del propio entorno se hagan presentes para provocar el accidente. 

Las limitaciones físicas, pérdida del equilibrio, déficits en la visión, enfermedades preexistentes o efectos secundarios de fármacos hacen a los abuelos más propensos a tropezar con objetos.

Los ansiolíticos, antidepresivos, opiáceos, analgésicos, pastillas para dormir, antihipertensivos, diuréticos y algunos medicamentos para el corazón, alteran la tensión y reducen la presión arterial, provocando mareos y pérdida de la noción de espacio. Por lo tanto, hay más riesgos de caer. 

Igualmente, hay que tener en cuenta que los mayores no pueden responder con la misma rapidez a los peligros de su entorno. Nos referimos a una escasa iluminación, alfombras que no estén bien fijadas al suelo, pisos resbaladizos o con relieves, caminerías irregulares, cables en las áreas de tránsito, entre otros. 

Prevención 

Parte del cuidado de personas mayores incluye la adaptación del hogar para hacer que su entorno sea más seguro y desplazarse les genere confianza. El mayor número de caídas se dan en las viviendas cuando los abuelos están en movimiento. Por ejemplo, intentando salir de la cama o acostarse, levantándose del sofá o usando el inodoro. También, al caminar, subir y bajar escalones. Si quieres prevenir futuros accidentes: 

  • Busca el apoyo de un cuidador de mayores. 
  • Color para diferenciar los pasamanos de las  escaleras y barras de apoyo en los baños. 
  • Dar al abuelo el calzado apropiado para que no resbale. 
  • Comprueba que exista buena iluminación en los baños y esté disponible a cualquier hora. 
  • Ofrece bastones o andaderas. 
  • Motiva al mayor a realizar actividad física. 
  • Permanece atento a síntomas como mareos, agotamiento, o cualquier otra situación en la que el adulto sienta desestabilización. Asimismo, revisa la medicación y sus efectos secundarios. 
  • Enseña los pasos adecuados para incorporarse, sentarse, acostarse. 

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