Cómo prevenir lesiones siendo cuidador

Cómo prevenir lesiones siendo cuidador

Ser cuidador de personas mayores es una labor gratificante, aunque también muy agotadora y hasta peligrosa. La razón es que te puedes lesionar fácilmente mientras ayudas a otros a levantarse, bañarse o moverse.   

¿Qué debes hacer para prevenir lesiones si eres cuidador profesional o familiar?  La buena noticia es que hay formas de reducir estos riesgos y aquí te las explicamos.

¿Cómo nos afectan las lesiones?

Si te dedicas a ser cuidador interno de pacientes o si ejerces el cuidado en casa de un ser querido que envejece debes tener en cuenta que, en ambas situaciones, te expones diariamente a sufrir lesiones. Y lo peor que te puede pasar es que sean lesiones graves, dolorosas e incapacitantes.

Cada año, miles de cuidadores profesionales y familiares se lesionan, así que este tipo de daños son muy frecuentes. Las consecuencias son:

  • Jornadas de trabajo perdidas
  • Gastos elevados en tratamientos médicos y farmacológicos
  • Acumulación de tareas personales que no se pueden atender
  • Terapias costosas para rehabilitarse u hospitalización
  • Daños a la salud persistentes o permanentes

En fin, son muchos los problemas que vienen con las lesiones.

Un estudio realizado por la Universidad Estatal de Ohio encontró que el 94% de los cuidadores profesionales y familiares se quejan de dolores musculoesqueléticos en varias partes del cuerpo. 

Y hay más. En 66% de estos casos, tales dolores interfieren en su calidad de vida. Así que estamos hablando de un problema serio que debemos evitar a toda costa.

Lesiones más frecuentes al cuidar de otros

Entre los cuidadores familiares, que son aquellos parientes o amigos que cuidan en casa de una persona de avanzada edad, es mucho más común lesionarse. La mayoría de las veces, porque se desconoce cómo realizar movimientos seguros.

También, el profesional de asistencia y de cuidado de mayores puede sufrir accidentes. Entre las lesiones más frecuentes entre cuidadores profesionales y cuidadores familiares tenemos:

  • Lesiones en el sistema musculoesquelético que incluyen afecciones en la espalda, distensiones y esguinces.
  • Caídas, pérdidas de equilibrio, resbalones y tropiezos.
  • Golpes, cortadas, heridas. 
  • Moretones o lesiones causadas por pacientes inquietos, temerosos, con demencia o Alzheimer.

La zona de la espalda es la parte más expuesta a lesionarse en los cuidadores. Dado que es el área que recibe mayor carga y pesos al levantar y mover personas y objetos, al hacerlo de manera incorrecta es más probable sufrir daños.

Para las personas mayores imposibilitadas de caminar o que requieren de ayuda para levantarse de sillas o camas, bañarse y acostarse, es importante la actitud de autocuidado que debe mantener siempre quien los asiste o ayuda.

Consejos para prevenir lesiones 

Para prevenir lesiones siendo cuidador, los manuales profesionales de la Organización Mundial de la Salud, atención geriátrica y enfermería recomiendan lo siguiente:

Usa productos para facilitar el levantamiento

Ayudar a alguien a levantarse, entrar y salir del baño o hacer las transferencias de la cama a la silla son los puntos más críticos en el trabajo del cuidador.

Utiliza aparatos que reduzcan los riesgos. Estos equipos pueden ser elevadores manuales o mecánicos, dispositivos de agarre, almohadillas de pivote, cinturones de seguridad, barras de palanca y de agarre para el baño.

Practica los movimientos seguros

Como cuidadores habrás escuchado la recomendación médica y deportiva de usar las piernas para levantar y no la espalda para hacer esfuerzos. Aunque lo tengamos siempre en cuenta, puede que se nos olvide hacerlo bien y es cuando nos lesionamos.

Así que practica, como si se tratara de una disciplina marcial, la manera de hacer estos movimientos seguros. Si al hacer movimientos sientes dolor en la espalda, no dejes de buscar ayuda médica y hacerte una evaluación.

Despeja los pasos y mueve muebles

Eliminar las obstrucciones al caminar es una de las principales medidas para evitar que pacientes mayores y cuidadores se lesionen o caigan.

Habilita pasarelas en el interior de la vivienda que sean seguras y quita las alfombras que se muevan o se levanten. Despeja todos los pasos de muebles u objetos del piso que impidan caminar en línea recta o que lleven a tropezarse con algo.

No salgas sin tus zapatos antideslizantes

Por algo existen los zapatos profesionales para cuidadores y personal de enfermería. Comprarte uno de ellos no es un gasto, es una inversión en tu salud.

Busca los más adecuados para cuando tengas que ayudar a la persona de edad avanzada a entrar y salir del baño. O para subir y bajar escaleras y caminar por pisos mojados o resbaladizos.

Coloca un banco seguro en la ducha

Es muy frecuente que los mayores tengan miedo a bañarse. Los cambios en la presión arterial al hacer un esfuerzo, la debilidad física o un mareo repentino puede hacerlos perder fácilmente el equilibrio. 

Como la sala de baño es una de las zonas más peligrosas, debido al alto riesgo de resbalarse y lesionarse, busca maneras de prevenir accidentes. Una forma es haciendo la hora del baño más segura, con un banco de ducha antideslizante y con barras de apoyo.

Ejercicio

Ejercítate a menudo

Fortalecer los músculos de tu espalda te ayudará a protegerla de lesiones. Si tu columna es apoyada por un sistema muscular que se ha hecho más fuerte con ejercicios, tendrás menos riesgos de lesionarte.

La ejercitación frecuente evita padecer distensiones de espalda o esguinces. Incluye en estos hábitos el dormir lo suficiente para que te mantengas alerta en las horas en las que cuidas a personas mayores.

Levanta objetos con técnicas adecuadas 

Al momento de levantar objetos, evita hacer giros rápidos o movimientos que te resulten incómodos o sean repetitivos. Estos pueden causarte lesiones en los hombros y en la parte baja de la espalda.

Haz lo siguiente:

  • Posiciónate adecuadamente cada vez que vas a levantar algo. 
  • Mantén recto el cuerpo junto con los hombros y no gires la espalda sin mover el resto del cuerpo. 
  • Al empezar a levantar, hazlo doblando las piernas desde las rodillas y usa los muslos y no la espalda, para impulsarte.

Busca ayuda de otros cuidadores

Para evitar sufrir lesiones, una de las mejores cosas que puedes hacer es reconocer que necesitas ayuda. Si eres cuidador familiar, contratar a un cuidador a domicilio o de relevo es una de las mejores maneras de distribuir tareas y reducir las cargas

Tener ayuda profesional para movilizar a un paciente dependiente o tenga algún grado de limitación con la movilidad, puede reducir los riesgos de lesionarse.

No satures tu cuerpo y descansa

Si te lesionaste, dale descanso a tu cuerpo para que sane. No insistas en volver a las actividades de cuidado de mayores sin antes saber cuánto tiempo te tomará en realidad curarte. Consulta con el especialista sobre lo que puedes o no hacer.

Con estos consejos, esperamos que puedas reducir los riesgos de lesionarte siendo cuidador. Ten en cuenta que es importante capacitarse y practicar a menudo las técnicas correctas para mover a los pacientes mayores. 

Si tienes dudas, busca en internet un curso online para actualizarte o anótate en capacitaciones organizadas por instituciones públicas, gremios, grupos o entidades privadas. 

¿Formas parte de grupos de cuidadores? Las redes de apoyo pueden ser de mucha ayuda para hacer tus tareas de manera más eficiente, segura y con menos lesiones.